Todo arte y tradición tiene un origen, un primer maestro y hoy os vamos a hablar del considerado fundador de nuestro arte de sanar favorito: el Masaje Tradicional Tailandés: Khru Shivako.
KHRU SHIVAKO
Jivaka Kumar Bhaccha, conocido como Shivagakomarjap, Khru (maestro) Shivako o como lo llaman en Tailandia, “Po (papá) Shivako”, fue un prestigioso médico que nació en la India hace más de 2500 años. Y como todo buen maestro, tiene que tener su leyenda. La de Shivako cuenta que fue abandonado por sus padres biológicos y adoptado por un príncipe. Y que un día decidió alejarse de las comodidades de palacio (lo mismo hasta aquí os resulta familiar) para dedicarse durante muchos años a estudiar medicina con su gurú.
Otras fuentes cuentan que Shivako fue el médico personal en la corte Sakya, donde reinó el padre de Buda. Y que a sus 29 años, cuando Siddartha emprendió su camino en busca de la espiritualidad, el Rey Suddhodana ordenó a Shivako que lo cuidara en sus viajes.
Se cuenta también que las enseñanzas de Khru Shivako junto con otras prácticas de sanación como el Ayurveda o la medicina herbal. Así como nuestros famosos saquitos herbales o Luk Pra Kob (que podréis aprender a realizar en Rak Saeng). Han sido desarrolladas y trasmitidas en Tailandia por la comunidad budista hasta mediados del S.XX. Cuando el gobierno tailandés decide edificar hospitales y escuelas de Medicina y Masaje Tradicional Tailandés, y tratarlo como el gran tesoro que es.
CULTO Y SALUDO A SHIVAKO
Como hemos comprobado en todos nuestros viajes, es común encontrar una estatua de Shivako en los templos tailandeses, a la cual siempre que podemos, realizamos nuestra pequeña ofrenda. En Tailandia normalmente se ofrenda con incienso, fruta, flores y el canto de un mantra en Pali, antigua lengua sagrada del Budismo Theravada.
Además al ser considerado el padre de la Medicina Tradicional Tailandesa, es costumbre en todas las escuelas de Masaje Tradicional de Tailandia ofrendar cada mañana una oración en forma de mantra. El Wai Khru (o saludo al maestro) antes de comenzar las clases: Wai = ไหว้ = Respetar + Khru = ครู = Maestro.
Pero el Wai Khru no es exclusivo del masaje thai, se trata de un ritual milenario que se realiza en Tailandia en señal de respeto y agradecimiento a los maestros en diferentes artes y oficios. También lo podemos ver en bailarines, luchadores de Muay Thay o académicos.
“La enseñanza del Wai Khru es la de recordar nuestra relación y pertenencia a una tradición milenaria: la de tener presente y agradecer todo lo aprendido del maestro actual. Y a través de los maestros de éste, y a todos los maestros anteriores, los que están y los que no, y a todos los que en algún sentido, están llegando al conocimiento que estamos adquiriendo.”
¿No os parece una tradición preciosa? ¿Os imagináis que esta ancestral costumbre, muestra de respeto hacia los que nos ayudan a aprender hubiera calado en Occidente, en todas las maestrías? Desde hoy, os animamos a practicar vuestro “Wai Kru” y ejercitar este agradecimiento.